jueves, 25 de junio de 2009
Gracias
Gracias. Gracias a los que se sumaron como seguidores.
Luego comenzaré a enredarme con los blogs.
Saludos a todos.
Continuo aprendiendo.
TUNY
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TUNY
sábado, 20 de junio de 2009
Tarea obligatoria de T y D
En los últimos quince a veinte años, se han incorporado en los distintos ámbitos de la sociedad innumerables herramientas tecnológicas. Respecto con las vinculadas a la información, podemos mencionar que abruptamente nos hemos encontrado con varios elementos de tecnología micro electrónica, de computación (incluyendo la máquina y por sobre todo los software), de telecomunicaciones, de optoelectrónica, hasta de ingeniería genética. Por ejemplo: celulares, pen drive, MP3, MP4, radios y TV de tamaños cada vez más compactos, GPS, PC, notebook, DVD, amplificadores, palm, cámaras digitales, videos cámaras digitales, bluetooth, fibra óptica, Internet: banda ancha y el tratamiento de la información genética.
Lo sorprendente es cómo esta amplia gama de ofertas se ha masificado más allá de la situación socio – económica, es más puedo aventurar que se instaló un consumo indiscriminado, como signo de pertenencia, que representa códigos de identidad en el marco de inclusión / exclusión del acceso a la tecnología de la información como sinónimo de pertenencia a la sociedad misma.
Actualmente el proceso de transformación tecnológica, se expande exponencialmente, especialmente enmarcada en un mundo digital y constituyendo un hito que viene a dar cuenta de cómo cambia lo establecido. Podemos asegurar que ha penetrado en todos los dominios de la actividad humana: trabajo, ocio, medicina, estudio. Cabe aclarar que este ingreso no se dio sin resistencias, que hoy han minimizado a gran escala, podemos identificar los primeros focos de resistencia en las generaciones más adultas, viabilizándose en las generaciones más jóvenes. Si bien existen muchos adultos que hoy han sido seducidos por afeites de las nuevas tecnologías de la información, ya sea por placer o cuestiones laborales, no podemos dejar de reconocer que son los más jóvenes quienes audazmente se volcaron a este nuevo mundo, que hoy constituye su cotidianeidad.
Asombrosamente nos hemos sumergido al uso de esta tecnología, que cada vez utilizamos más. Ya resulta cotidiano escuchar un rington de un celular, leer una cadena por email, intervenir en un blog o en un fotolog, reproducir música en pequeños aparatos en forma digital, conversar on – line, etc.
Pero en las escuelas, especialmente las públicas, el ingreso de estas nuevas tecnologías, muchas veces se limita a conocer algunos programas básicos y/o tener algunas computadoras en un determinado espacio, destinado a tal fin (Y seguramente protegido de robos, roturas, mal uso, uso indiscriminado, etc.) El tratamiento que se le da en lo escolar difiere ampliamente del uso que se le otorga en la vida diaria, generando muchas veces una negación a abordar estas actividades, tanto por parte de los profesores como de los alumnos.
Por otro lado, notamos que el abordaje que se le da en las escuelas, se encuentra muy ligado a actividades aplicacionistas, que tienden a simplificar el potencial de las nuevas tecnologías. Considero que abrir el debate sobre el uso que se les da, la veracidad de los datos que encontramos, la rapidez con que fluye la información, las intenciones de distinta índole, que persiguen los que informan, venden, ofrecen... y la vulnerabilidad de muchos sujetos que se dejan seducir por la magia y el color, sin analizar, ni cuestionar lo que reciben... ¡esto también es contenido a trabajar escolarmente! Otra instancia, no menor, la constituyen las posibilidades que ofrecen, con relación a trabajar en equipo, conectarse en red, debatir, ampliar información, comparar, indagar y confrontar con el otro más allá de las “supuestas” distancias. Estas cuestiones no menores, también deberían abordarse como contenido a enseñar, incluyéndolas en las currículas escolares, con un tratamientos que exceden el “apretar un botón” o “cliclear un mouse”.
Creo que no podemos dejar de analizar las implicancias que contienen estos cambios, ya que no involucran una transformación lenta y suave, sino que por el contrario, se caracterizó por ser muy rápida y penetrante. Tal vez esta instancia se vincule al lugar y al poder de la tecnología, que se instala en los usuarios mismos, ya que somos los sujetos los que nos la apropiamos y la redefinimos. Lo cual conlleva a que en el centro de la escena aparezca el Sujeto, que se presenta como libre de elegir, de usar, de pensar, de actuar. Esta situación es lo más relevante en esta revolución, puesto que se vincula con una reestructuración del capitalismo mismo, que hoy se estructura desde una gestión más flexible, más descentralizada, con posibilidades de interconexiones empresariales. Lo que pone al Sujeto en una posición muy distinta de la que entendía el marxismo clásico en la relación binaria empresario / obrero, muy ligada al poder y a la toma de decisiones desde relaciones de poder vertical y direccional. Hoy el acceso a las nuevas tecnologías pone en líneas más horizontales dichas relaciones, pero sólo desde la ilusión que el poseer condice con el poder, ya que no modifica las relaciones descriptas.
A esta altura del análisis, podemos reflexionar sobre las consecuencias que tiene la existencia de un sistema de comunicación basado en un lenguaje digital universal. Una de las que me gustaría mencionar es el inter-juego entre los cambios sociales que surgen por la incorporación de las redes informáticas interactivas y las agrupaciones desde las identidades primarias.
Respecto, al lugar que ocupa el Sujeto en este nuevo entramado social, que se caracteriza por comunidades virtuales, se devela una tendencia a romper con la idea tradicional occidental de Sujeto separado e independiente. En este encuadre, el “Yo” que se siente solo y/o aislado, procura en los ordenadores, la posibilidad de conectarse a una identidad compartida. Esto da cuenta de que estamos ante la necesidad de construir un “nuevo Yo”, pero colectivo. Coincido con las palabras de Manuel Castells cuando refiere que hemos entrado en un mundo multicultural e interdependiente, que sólo puede comprenderse y cambiarse desde una perspectiva plural que articule la identidad cultural, la interconexión global y una política multidimensional.
La educación juega en este panorama un Rol preponderante, ya que debe atender a los desafíos del futuro. Desafíos que no podemos conocer y sostener de manera absoluta y terminante, puesto que debemos partir de la provisionalidad de todo conocimiento. Y con ello la imposibilidad de prever los problemas y preguntas que nos interpelarán, en tanto humanos, en el futuro, lo que conlleva a prepararnos desde la incertidumbre.
Cabe aclarar, que Edgar Morin, en su texto “Los Siete saberes necesarios para la Educación del futuro” al referirse a la enseñanza de las incertidumbres, enfatiza en la necesidad de afrontar riesgos, lo inesperado, lo incierto, pero no de manera caótica.... él sugiere que para navegar en un océano de incertidumbres, se deben sostener archipiélagos de certezas. Coincido con el autor ya que lo importante es evitar la descontextualización, la fragmentación y la discontinuidad, puesto que corremos el riesgo de olvidar al Sujeto, al Sujeto que piensa, al Sujeto que decide, al Sujeto que usa... quien debe reconocer la diferencia entre la buena o mala decisión, entre el uso y el abuso... es decir entre pensar... o dejarse llevar por la moda.
PATRICIA MACCARREIN (alias TUNY)
Referencias Bibliográficas
- Manuel Castells; La era de la información (1997); Tomo I, Economía, Sociedad y Cultura; Capítulo 1: "La revolución de la tecnología de la información".
- Manuel Castells; La era de la información (1997; Tomo I, Economía, Sociedad y Cultura, Prólogo: "La red y yo".
- Levis, Diego; Cumbre Mundial de la Sociedad de la Información (2004): "Modelo para armar” en Signo y Pensamiento nº 44, Bogotá.
- Los siete saberes necesarios para la educación del futuro. Edgar Morin (1999) UNESCO-
Lo sorprendente es cómo esta amplia gama de ofertas se ha masificado más allá de la situación socio – económica, es más puedo aventurar que se instaló un consumo indiscriminado, como signo de pertenencia, que representa códigos de identidad en el marco de inclusión / exclusión del acceso a la tecnología de la información como sinónimo de pertenencia a la sociedad misma.
Actualmente el proceso de transformación tecnológica, se expande exponencialmente, especialmente enmarcada en un mundo digital y constituyendo un hito que viene a dar cuenta de cómo cambia lo establecido. Podemos asegurar que ha penetrado en todos los dominios de la actividad humana: trabajo, ocio, medicina, estudio. Cabe aclarar que este ingreso no se dio sin resistencias, que hoy han minimizado a gran escala, podemos identificar los primeros focos de resistencia en las generaciones más adultas, viabilizándose en las generaciones más jóvenes. Si bien existen muchos adultos que hoy han sido seducidos por afeites de las nuevas tecnologías de la información, ya sea por placer o cuestiones laborales, no podemos dejar de reconocer que son los más jóvenes quienes audazmente se volcaron a este nuevo mundo, que hoy constituye su cotidianeidad.
Asombrosamente nos hemos sumergido al uso de esta tecnología, que cada vez utilizamos más. Ya resulta cotidiano escuchar un rington de un celular, leer una cadena por email, intervenir en un blog o en un fotolog, reproducir música en pequeños aparatos en forma digital, conversar on – line, etc.
Pero en las escuelas, especialmente las públicas, el ingreso de estas nuevas tecnologías, muchas veces se limita a conocer algunos programas básicos y/o tener algunas computadoras en un determinado espacio, destinado a tal fin (Y seguramente protegido de robos, roturas, mal uso, uso indiscriminado, etc.) El tratamiento que se le da en lo escolar difiere ampliamente del uso que se le otorga en la vida diaria, generando muchas veces una negación a abordar estas actividades, tanto por parte de los profesores como de los alumnos.
Por otro lado, notamos que el abordaje que se le da en las escuelas, se encuentra muy ligado a actividades aplicacionistas, que tienden a simplificar el potencial de las nuevas tecnologías. Considero que abrir el debate sobre el uso que se les da, la veracidad de los datos que encontramos, la rapidez con que fluye la información, las intenciones de distinta índole, que persiguen los que informan, venden, ofrecen... y la vulnerabilidad de muchos sujetos que se dejan seducir por la magia y el color, sin analizar, ni cuestionar lo que reciben... ¡esto también es contenido a trabajar escolarmente! Otra instancia, no menor, la constituyen las posibilidades que ofrecen, con relación a trabajar en equipo, conectarse en red, debatir, ampliar información, comparar, indagar y confrontar con el otro más allá de las “supuestas” distancias. Estas cuestiones no menores, también deberían abordarse como contenido a enseñar, incluyéndolas en las currículas escolares, con un tratamientos que exceden el “apretar un botón” o “cliclear un mouse”.
Creo que no podemos dejar de analizar las implicancias que contienen estos cambios, ya que no involucran una transformación lenta y suave, sino que por el contrario, se caracterizó por ser muy rápida y penetrante. Tal vez esta instancia se vincule al lugar y al poder de la tecnología, que se instala en los usuarios mismos, ya que somos los sujetos los que nos la apropiamos y la redefinimos. Lo cual conlleva a que en el centro de la escena aparezca el Sujeto, que se presenta como libre de elegir, de usar, de pensar, de actuar. Esta situación es lo más relevante en esta revolución, puesto que se vincula con una reestructuración del capitalismo mismo, que hoy se estructura desde una gestión más flexible, más descentralizada, con posibilidades de interconexiones empresariales. Lo que pone al Sujeto en una posición muy distinta de la que entendía el marxismo clásico en la relación binaria empresario / obrero, muy ligada al poder y a la toma de decisiones desde relaciones de poder vertical y direccional. Hoy el acceso a las nuevas tecnologías pone en líneas más horizontales dichas relaciones, pero sólo desde la ilusión que el poseer condice con el poder, ya que no modifica las relaciones descriptas.
A esta altura del análisis, podemos reflexionar sobre las consecuencias que tiene la existencia de un sistema de comunicación basado en un lenguaje digital universal. Una de las que me gustaría mencionar es el inter-juego entre los cambios sociales que surgen por la incorporación de las redes informáticas interactivas y las agrupaciones desde las identidades primarias.
Respecto, al lugar que ocupa el Sujeto en este nuevo entramado social, que se caracteriza por comunidades virtuales, se devela una tendencia a romper con la idea tradicional occidental de Sujeto separado e independiente. En este encuadre, el “Yo” que se siente solo y/o aislado, procura en los ordenadores, la posibilidad de conectarse a una identidad compartida. Esto da cuenta de que estamos ante la necesidad de construir un “nuevo Yo”, pero colectivo. Coincido con las palabras de Manuel Castells cuando refiere que hemos entrado en un mundo multicultural e interdependiente, que sólo puede comprenderse y cambiarse desde una perspectiva plural que articule la identidad cultural, la interconexión global y una política multidimensional.
La educación juega en este panorama un Rol preponderante, ya que debe atender a los desafíos del futuro. Desafíos que no podemos conocer y sostener de manera absoluta y terminante, puesto que debemos partir de la provisionalidad de todo conocimiento. Y con ello la imposibilidad de prever los problemas y preguntas que nos interpelarán, en tanto humanos, en el futuro, lo que conlleva a prepararnos desde la incertidumbre.
Cabe aclarar, que Edgar Morin, en su texto “Los Siete saberes necesarios para la Educación del futuro” al referirse a la enseñanza de las incertidumbres, enfatiza en la necesidad de afrontar riesgos, lo inesperado, lo incierto, pero no de manera caótica.... él sugiere que para navegar en un océano de incertidumbres, se deben sostener archipiélagos de certezas. Coincido con el autor ya que lo importante es evitar la descontextualización, la fragmentación y la discontinuidad, puesto que corremos el riesgo de olvidar al Sujeto, al Sujeto que piensa, al Sujeto que decide, al Sujeto que usa... quien debe reconocer la diferencia entre la buena o mala decisión, entre el uso y el abuso... es decir entre pensar... o dejarse llevar por la moda.
PATRICIA MACCARREIN (alias TUNY)
Referencias Bibliográficas
- Manuel Castells; La era de la información (1997); Tomo I, Economía, Sociedad y Cultura; Capítulo 1: "La revolución de la tecnología de la información".
- Manuel Castells; La era de la información (1997; Tomo I, Economía, Sociedad y Cultura, Prólogo: "La red y yo".
- Levis, Diego; Cumbre Mundial de la Sociedad de la Información (2004): "Modelo para armar” en Signo y Pensamiento nº 44, Bogotá.
- Los siete saberes necesarios para la educación del futuro. Edgar Morin (1999) UNESCO-
Intentando de nuevo
Hola a todos!!!!!!!!
Estoy intentando crear mi blog de nuevo.
En el anterior no puedo agregar nada
Espero haber aprendido algo nuevo.
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